El AYUNTAMIENTO INICIA UNA CAMPAÑA DE CONCIENCIACIÓN CIUDADANA PARA RETIRAR LOS EXCREMENTOS CANINOS DE LA VÍA PÚBLICA

El AYUNTAMIENTO INICIA UNA CAMPAÑA DE CONCIENCIACIÓN CIUDADANA PARA RETIRAR LOS EXCREMENTOS CANINOS DE LA VÍA PÚBLICA

Desde hoy hasta el 10 de marzo se propondrán distintas actividades para conseguir mejorar la imagen del pueblo, incluyendo una campaña en los medios institucionales hasta los avisos de la Policía Local, que revisará que los propietarios de las mascotas traen la bolsa para recoger los excrementos, informará de la campaña y confirmará que los animales están identificados con chip. Una vuelta dada la información, a partir del 11 de marzo se sancionará a toda aquella persona que no cumpla la normativa de recoger la caca.

Benissa, más limpia y también más saludable. Este es el objetivo de la nueva campaña para concienciar a las personas que tienen mascota y que no cumplen con su responsabilidad de recoger los excrementos caninos, cuando los animales hacen sus deposiciones a la vía pública.

A partir de hoy, en colaboración con las concejalías de Sanidad y Benissa Impulso, se comienza una campaña para informar los propietarios y propietarias de perros de las consecuencias de no hacer caso a las normativas. A pesar de que la mayoría de la ciudadanía tiene una conducta ejemplar, se ha detectado un aumento del número de excrementos de mascotas abandonados a las calles y parques de la población.

Además de generar un problema de imagen en el pueblo, causa una mayor preocupación los problemas que pueden causar los excrementos abandonados a la vía pública, relacionados con la salud de los vecinos y las vecinas, puesto que crean un foco de transmisión de enfermedades infecciosas, incluyendo posibles daños físicos debido a resbalones y caídas fortuitas.

La campaña estará fuertemente apoyada por los efectivos de la Policía Local, quien informarán todas aquellas personas que estén paseando con sus mascotas. A partir del 11 de marzo se podrá sancionar a los propietarios y propietarias que no recogen las caques de sus mascotas, con multas máximas de hasta 600 €, tal como contemplan las ordenanzas al efecto.